jueves, 19 de noviembre de 2009

La Esquina, mi esquina

La Esquina, mi esquina

El camino se hace paso a paso. Nadie conoce lo que acontecerá, por más que hayamos cruzado por un mismo lugar o situación, parece como si fuera el primer momento de muchos.

De todos los lugares posibles de encuentro, muchos optan por la esquina. Un día me pasó algo que me marcó definitivamente.

Habíamos acordado un horario en las esquinas ubicadas entre dos calles de renombre, para no equivocarnos. Llegada la hora, fui al encuentro y me encontré con el sorprendente cuadro de estar compuesta por cuatro esquinas. Cada una hace referencia a un punto cardinal.

Miré atenta cada una y me sonreí al sentir y pensar en silencio, era un silencio interior (-porque las avenidas suelen ser muy ruidosas- -¿verdad?-), pero me había sumergido en una imagen de la realidad del hombre, del ser humano.

Esquinas hay muchas, seres humanos también.

Esquinas que se nombra por como se ubican, los roles y las formas de los hombres también...Esquinas que te conducen a lugares, destinos diversos... seres humanos con ideas, pensamientos y vidas distintas también...

Esquinas...-suspiré. Miré el reloj y miré a lo alto. Allí estaba el sol todavía brillante y presente.

Volví a observar mi esquina, la más iluminada de las cuatro, y volví a pensar: -aunque todas las esquinas se parecen y todas conduzcan a un lugar, no cambiaría mi esquina, en esta me voy a quedar... Esquinas hay muchas pero una, sólo una, es la correcta.

Confié en mi fe, mi corazón y permanecí en ella, la cual ya conocía e identificaba más.

Ella fue mi guarida, mi terminal, mi lugar de encuentro, mi principio. Ella marca en mi elección por UN camino de AMOR, a un DIOS único y trino.

"La esquina", déjenme llamarle "Mi esquina", muestra de mi Dios, me dio la certeza que aún en la liberta de los hombres, un camino, una esquina dará la plena felicidad.

María Agustina Hildt Macias-Periodismo ECCOS-Est. Dcho UBA ¡**Para Adelante Siempre**!

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